¡Maldito día! Desde el momento en que llegó le hicimos la vida imposible ¿Por qué?
¡Pues porque sí y punto! En esa casa mandábamos nosotras y ella no lo iba a impedir.
El día anunciaron que el próximo sábado se celebraría un baile en el palacio. En él, el príncipe elegiría a su futura esposa. Mi hermana y yo nos pusimos muy contentas al contrario de Cenicienta que no se alegró nada cuando la dijimos que ella se quedaba en casa . ¡Qué se fastidie! ;además ¿para qué va ella a ir al baile si lógicamente el príncipe no se va a enamorar de una criada.
Ya en el baile el príncipe miró a todas y cada una de las damas, a cual más bella pero de repente su mirada reparó en una hermosa joven rubia que entraba por la puerta.
¿Quién era? Nos preguntábamos todos.Nadie lo sabía ni siquiera el príncipe, pero a mí me resultaba familiar; bueno, el caso es que estuvo toda la noche bailando con él hasta las doce que salió corriendo sin que nadie supiera por qué.
Al día siguiente el príncipe y sus siervos fueron por las calles anunciando que en el baile se había encontrado un zapato de cristal y no se sabía de quién era.Esto fue lo que dijo el príncipe:
A LA DAMA A LA QUE LE VALGA ESTE ZAPATITO DE CRISTAL SERÁ MI FUTURA ESPOSA
Y así lo hizo.Al quinto día de anunciar esa noticia vinieron a mi casa a ver si nos valía el zapato, y para nuestra sorpresa le valía a Cenicienta
¡No puede ser! Pues sí así era. Bueno el caso es que se casó con el príncipe y no he vuelto a saber de ella.
´PAULA NÚÑEZ 1ºA
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