Hoy, entre todos, hemos escrito un poema imitando a Carlos Edmundo de Ory. Aquí tenéis el poema original:
Hipérbole del amoroso
Te amo tanto que duermo con los ojos abiertos.
Te amo tanto que hablo con los árboles.
Te amo tanto que como ruiseñores.
Te amo tanto que lloro joyas de oro.
Te amo tanto que mi alma tiene trenzas.
Te amo tanto que me olvido del mar.
Te amo tanto que las arañas me sonríen.
Te amo tanto que soy una jirafa.
Te amo tanto que a Dios telefoneo.
Te amo tanto que acabo de nacer.
Aquí os dejo vuestro poema. ¿Reconocéis vuestro verso?
Te amo tanto que vivo en las nubes.
Te amo tanto que se me corta la respiración.
Te amo tanto que eres mi princesa.
Te amo tanto que lucharía por tu amor.
Te amo tanto que me reflejo en tus ojos.
Te amo tanto que la noche se me hace día.
Te amo tanto que te dibujaría en la luna.
Te amo tanto que te esperaría cien vidas.
Te amo tanto que te dibujaría en la luna.
Te amo tanto que te esperaría cien vidas.
Te amo tanto que me sonrojo cuando te veo.
Te amo tanto que te bajaría la luna.
Te amo tanto que barrería desiertos.
Te amo tanto que haría que un avión lo escribiese.
Te amo tanto que teatro no es.
Te amo tanto que iría a la Luna sin nave.
Te amo tanto que pienso que estás a mi lado.
Te amo tanto que soy una mazorca.
Te amo tanto que pienso que estás a mi lado.
Te amo tanto que soy una mazorca.
Te amo tanto que besaría la luna.
Te amo tanto que muero si no estoy contigo.
Te amo tanto que a mi corazón le falta un hueco.
Te amo tanto que iría al espacio para cogerte una estrella.
Te amo tanto que iría al espacio para cogerte una estrella.
Te amo tanto que tengo ganas de comerme el mundo.
Te amo tanto que formaría un tsunami con lágrimas.
Te amo tanto que me metería en una jaula de leones.
Te amo tanto que me lo tatuaría en la frente.
Te amo tanto que no respiro, sino suspiro.
Te amo tanto que haría todo lo que fuera por ti.
¡Buen trabajo!
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